BIENVENIDO AL BLOG DE LOS DEVOTOS DE LA DIVINA MISERICORDIA - GRUPO DE ORACIÓN DE LA PALMA DEL CONDADO - HUELVA - ESPAÑA

domingo, 30 de marzo de 2014

¿CÓMO ACERCARSE A CONFESAR?


 

1. La primera actitud que uno debería tener cuando se acerca a la confesión es la de buscar encontrarse con Jesús, que es la misma actitud de Zaqueo el recaudador de impuestos, que corrió adelantándose a las multitudes y se subió a un árbol en un esfuerzo por ver a Jesús.
Según Mons. Bernie Schmitz, vicario para el clero de la archidiócesis de Denver, Zaqueo el recaudador de impuestos ejemplifica la actitud correcta para acercarse a la confesión. Él corre hacia Jesús, no se aleja de Él, y comprende que el perdón conlleva una obligación de cambiar la propia vida (cf. Lc 19, 1-10).

Interviniendo en la Conferencia Viviendo la fe católica 2012 de la archidiócesis de Denver (EEUU), monseñor Bernie Schmitz, que también es el párroco de la parroquia Madre de Dios de Denver, habló a los participantes sobre “Cómo hacer una buena confesión”. Usó ejemplos de la Escritura para ilustrar las actitudes apropiadas necesarias para acercarse al sacramento.

El sacerdote destacó que al recaudador de impuestos “no le importaba nada lo que pensaran los demás” y “estaba dispuesto a hacer el ridículo” para encontrarse con Jesús. Señaló que “una de las primeras cosas a conquistar cuando vamos a la confesión es la idea de lo que van a pensar los demás”.


Destacando que Zaqueo estaba tan ansioso de ver al Señor que corrió adelantándose a las multitudes y se subió a un árbol, el sacerdote dijo que al cobrador de impuestos “le urgía reconciliarse”.

"Venimos a la confesión porque, como Zaqueo, deseamos ver a Jesús”, afirmó. “Pienso que es importante que veamos la confesión no como la ve nuestra sociedad civil, como una manera de atrapar a un ladrón y asegurarse de que va a la cárcel.

Cuando vemos la confesión de esa manera, se convierte en un castigo, y no en un momento de libertad. Zaqueo corre porque está buscando la libertad. No está huyendo del Señor, sino más bien corriendo hacia Él”.

Después de que se encuentra con el Señor, Zaqueo dice: “Daré, Señor, la mitad de mis bienes a los pobres; y si en algo defraudé a alguien, le devolveré el cuádruple”.

"Él entendió que el perdón lleva obligaciones”, dijo monseñor Schmitz. “Cuando damos el paso para ser perdonados, tomamos nuevas responsabilidades y nueva vida. Él empieza a vivir su vida cristiana con más convicción”.

“Cuando nos reconciliamos, entonces asumimos nuevas obligaciones y nos damos cuenta de que tenemos una nueva misión”.
2. La mujer pecadora del Evangelio de Lucas nos muestra cómo acercarnos a la confesión con humildad y conciencia de nuestro pecado. Ella llora por sus pecados, porque se da cuenta de que ha dañado su relación con Dios, y busca la reconciliación por el amor.
Habría que acercarse al sacramento de la confesión con humildad y con el reconocimiento del propio pecado, dijo Mons. Schmitz. Y ofreció como ejemplo la mujer pecadora del Evangelio de Lucas que se acerca a Jesús en la casa de un fariseo y le lava los pies con sus lágrimas (Lc 7, 36-50).

"Y poniéndose detrás, a los pies de él, comenzó a

lunes, 3 de marzo de 2014

EL INFIERNO EXISTE...

http://www.infovaticana.com/blog/adelantelafe/el-infierno-en-el-lenguaje-progre-y-modernista-se-niega-lo-que-se-afirma/

 

El lenguaje teológico-pastoral del progre (o modernista, que es en realidad lo mismo) se caracteriza sobre todo por la ambigüedad y la manipulación de los axiomas para tergiversar el sentido último de los mismos. Un ejemplo muy claro es la explicación progre sobre la existencia del Infierno, dogma de Fe definido por la Iglesia Católica y fundamentado, como todo dogma, en la Palabra de Dios ya que Cristo lo anuncia en los Evangelios en más de veinte ocasiones. Veamos la teoría modernista sobre el Infierno.
El modernista no niega la existencia del infierno: afirma su existencia. Y con ese previo se protege de ser acusado de negar un dogma de fe. La cuestión es que en realidad NIEGA en el fondo lo que AFIRMA en la forma. Y para ello la teología progre desarrolla una triple concreción:
1: El Infierno existe, pero está VACÍO. Este primer apunte se basa especialmente en la teología de Von Balthasar.
2: El Infierno existe, pero es intrahistórico (vocablo procedente de la literatura de Unamuno). Este segundo apunte bebe de la teología de la liberación sobre todo. “Si quieres visitar el infierno vete al tercer mundo”…..dicen los progres.
3: El Infierno existe, pero es personal. Aquí nos encontramos con el psicologismo y su influencia en la teología en aras a vaciar la trascendencia de la misma. “Si quieres visitar el